DE MUSAS DIOSAS Y PALABRAS DE MUJER

TUS VELEROS     Avanzan descosiendo los hilos   de mis aguas,   izando velas a rumbos desconocidos.   Adentelladas va surcando y revoloteando   a mis treguas,   entre los pliegues de corales y estrellas   saladas,   acoplando el gemir de las caracolas   aguamarinas.   Tus luceros clandestinos irrumpen   en la cámara nupcial,   desvela la mantilla marinera,   y avanzan adentelladas buceando   en mis regazos, adentelladas… adentelladas vas efervescente en los rumbos   desconocidos y no marcados   amarrándote en las crestas de mis olas   a dentellada.   29.6.2017   Carmen Hernández Rey ©® autora extremeña

  DUELE DECIR… NO DECIR   -la verdad de lo que siento- Pero… ¿Qué tendría que decir yo, hoy,   escribir que las palabras cayeron   y están como tinaja en terraplén?   Que a veces es mejor pasar un tupido   velo o poner un cerrojo sin llave,   Podría pasar de puntillas en este   dolor, sentir que las espinas son   apenas el beso de unas ortigas   en mi piel, y que la hinchazón   es apenas de unas horas,   que lentamente afloja su presión.   ¿Lograría decir la palabra: justa,   o injusta, la que calma o castiga?   La innegable ¡la que condena a vivir   sin vida! y esto duele más de lo que   yo quisiera y llegar a pensar pudiera.   Duele, se revuelven las tripas,   el estómago da dos vueltas,   y la sangre golpea mi cabeza   da vueltas como zigzag de feria… como zigzag de feria   corre el dolor en mis venas   reventándolas de dolor y pena.   29.6.2016   Carmen Hernández Rey ©® autora extremeña

TE PROPONGO Reutilizar aquellos besos los que guardamos bajo llave con una rosa fragante de pétalos lenitivos, -antes- de adquirir horas nuevas debilidades ajenas yo... Te propongo Reducir espacios, y dilapidar a nuestras materias primas- -respetando- a la Ternura, yo... Te propongo reciclar a "nuestros medios" antes, que se fragmenten en, residuos de agua y sal, adquieran a la inútil, vanidosa y orgullosa espera, yo... Te propongo abrir la caja de los sueños, amor, Te propongo soñar... -mi ternura- te sueña y desea. 29.6.2014 Carmen Hernández Rey ©® autora extremeña

MARGARITA   Dicen que soy.   Y no dicen nada más,   no detallan, ni argumentan   por qué soy esa flor.   ¿Pregunto, soy una Belli Perennis   annua, sylvestris, una reina...   Me dicen que soy asteráceas,   y compuestas... me acerco   mas a mí...   -Me miro-   no veo pétalos,   solo cuatro remos   algo desvencijados...   -remos y dedos-   Que van a contra corriente,   metido en un mar de dudas   en unos...   -si es y no es-   ¡comprendo!   Por qué soy margarita   asteráceas,   y compuestas...   y no una uniforme flor.   Dicen que soy   Margarita.   dejo algunos de mis datos:   tolera lugares que estén situados en   -semi-sombra-   muy resistente a muchas,   enfermedades y plagas.   CURIOSIDAD DE MÍ...   la margarita es   -una flor-   Y simboliza la pureza.   ¿...? 28.6.2014   Carmen Hernández Rey © ® autora extremeña

NO TE PUEDO   Contener del todo   y te sé -dentro de mi útero- tú circulas   a mis hormonas las deambulas   y las recorres   a golpe de talón   a golpes las transfieres   en el silencio diurno   te anocheces y te haces naciendote-me en tu luz.   No, no te abarco   ni -tan siquiera-   puedo imaginar el fin tuyo en mi interior.   Puedo ver tu lado oscuro   ese que nadie ha visto   jamás ¿Cómo podría verlo   desde mi último yo?   saberte en tú cráteres,   -esos-   que te vaticinan y disponen en la bandera   hostil que hondean a media   hasta en la imposición   de tu sien.   Apenas consigo tenerte   un lustro de mi tiempo como segundo   obtengo luz de luz   en la ausencia de juicio   equitativo de ese todo   que diga todo de mí     Pero tú me sabes   me tienes   me retienes   me confundes   me revuelves   me olvidas.   Siempre eres tú   luz que  

“MALDITO CAFÉ”   Semidesnuda quedé frente   a frente a ti, pero sin ti… junto a mi café   pero sin tu café   sujetando mi taza   pero sin tus manos,   mientras... tú, corrías calle abajo   y yo recogía ausencia   en cada sorbo,   y el café me hacia guiños,   yo le respondía   reteniéndole en mi garganta.   Y le digo   ¡Maldito grano! que despertaste   a su sueño de mi lecho,   a tu cabeza de mi almohada   esos tus ojos de los míos,   a tus sueños unidos   a los míos   ¡Maldito café!   Desamparado dejó a mi hombro   de tu dulce costado...   Por su culpa desleal aroma,   dejó a tu tiempo desligados   de los míos,   y mi memoria quedó   presa de la liturgia   del amor y vivido.   Y así sujetando a mi taza   huérfana de tus aromas,   miré el resto de su café,   ¡Cerré los ojos!   Los cerré para recordar el ritual   precipitado de tus sorbos   casi escaldados entre risas   mientra

  TÚ   Nunca diré tu nombre   Tampoco tu muerte   Tu enfermedad   Tu forma de supervivencia   Tu forma de escapar de   a quien no amabas   te permitiste amar   a quien dabas y no dabas permiso   para... amarte.   Tú y aquellos vómitos en los cutres espacios de sabores agrios,   de rastreras monedas que nunca fueron lo suficiente para vivir   sin mendigar o vender   tu cuerpo, pero...   ¡nunca tu dignidad!   por más que te escupan   o renieguen, no...   No nunca diré,   que te hubiese gustado pasear,   por la Rambla agarrado de la mano,   pasear a tu amor sin miedo   a la piedra salida de cualquier   mano sin dignidad,   esa que de noche te busca   en las esquinas y luego   se santigua en la claridad.   Tú querrías poner los besos   en cualquier rayo del sol   caminar haciendo guiños a las tormentas,   besar su sien entre luna y Estrella.   ¡No!   Nunca diré tu sexo, ¿A quién le importa?   Y te recordaré sie