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Mostrando las entradas etiquetadas como ENCUENTROS POÉTICOS

AL DILUVIO DE OLIVOS Y...

AL DILUVIO DE OLIVOS Y... Al dios uno o trino - si existen- invoco en esta travesía donde la sed de un desierto se hace otra vez diluviano . Les invoco una vez más para que pongan corriente cálidas de vientos nuevos en las alas de palomas de una paz fructíferas y sin delirios de sangre, que no se las detengan entre los mares de agua, sed, libros y de olivos... Que sigan siendo las milenarias - ramas de olivos- las pongan voz en gritos, ramas de vientos oníricos el nexo de unión en pico de palomas el fin de tanta paz en olvido y   abrazos de justos... !Les invoco! a que nos unjan con la magnanimidad del fruto del terruño con la raíz de los olivares, con la ceniza con el humo de sus podas nos purifiquen de norte a sus de este a oeste en Extremadura y Úbeda. ¡Oh! suelo divinos de tribunas donde las Musas se hacen voz de juez en lapso de poetas, Invoco, os invoco a todas para que seáis las monedas en ojos, en este tránsitos ilíc

CÁCERES

Poemas para el encuentro en red de Cáceres inéditos hasta ese día... CACERES De muros cancerberos, morena y templada,  impoluta y bizarra… bella, como los Cantares del Cantar... tú eco de torres las  albarranas, la Bujaco, la Yerba, el Horno, encamisá en las murallas de piedras  de casta romanas. ¡Cáceres! perla, extremeña y señorial, arte toda sana y domestica, urbana de rimas y leyendas -te canto hoy- ¡Cáceres! la judía, almohade y cristiana, de aljibes sopranos, arcos y estrellas, ella zarcillos en gárgolas, de Extremadura  Cáceres es -su Niña Perla- ¡Cáceres, para soñar… soñar poesía en ella! 1.12.2016 Carmen Hernández Rey ©®autora extremeña  

SE ACERCA LA SEGUNDA NIÑEZ

SE ACERCA LA SEGUNDA NIÑEZ -poesía corregida- Y… Hiere. Se acerca con recuerdos del un día como el ayer, titubeando viene en letras, aparece de pronto -sin esperarla- con lengua de trapo en niña vieja. Ella, revuelve mi historia en ese baúl donde mi equipaje abre la caja de pandora… abre la maleta abandonada y dejada en un andén con cientos de estaciones de olvidados recuerdos… -se acerca- está muy cerca esta segunda niñez, es mi destino más inmediato de recuerdos y cargadas emociones de un antaño, que se impone en esta vejez cerca… ¡Que me habla con voz de pajarito! pájaro negro, atada su pata con fina cuerda, es mi ¡primer juguete! en este ayer niña… cierro, cierro mis ojos, y veo a mis dedos infantiles enredándose en su pico, mientras le daba un mendrugo mojado en leche. Patita atada a mi memoria es, ella toma recuerdos en mis recovecos sin nombres, hoy venideros y certeros -sin admit