NO IMPORTA
Si es un dedo
apuntando
el que me ciega,
no importa estar
ciega
si acaso con ello el
dolor
se calma.
No importa que la
luna
esté oculta en ellos,
esté visible en los
otros
o que una nube la
encierre
celándola
entre aguamieles de
mil recuerdos
que se apagan,
me van apagando.
No importa mis veinte
dedos,
si uno solo ya no te
roza,
apenas con un verso,
no importa que las
estrella
sigan perenne o
fugaces,
cuando en tus luceros
verdes no me veo.
No importa si un cucú
espera
certero para cantar
loco
al justo minutero,
no importa porque
se hizo hacha en la
tala
de nuestro tiempo;
tan tierno
tan bello
tan hermoso
tan amado
amor que estás tan
lejos.
4.11.2019
Carmen Hernández Rey
®©autora extremeña
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