"tornar,
ingresar, ese cálido susurro que solo conocen, un solo lenguaje, tus labios y
los míos, amor...
Un
torno sin campanas
y
sin claustros;
sin
corredores
de
silencios.
Tornar, a ese cálido susurro
de
un solo lenguaje
sin
celos y miedos,
ingresos
de urgencias
o destierros,
atalaya
abandonada
tus
labios en este silencio
de
abandono de los míos,
vuelvo
in-perdono
de
los míos, por ese vuelco
de
campanas en ciento ochenta
grados,
sin torres ni escaleras,
exiguas
notas de orfeón
sin
armonías,
tocatas
de fuegos,
o
entradas de piratas
costa
sin defensas.
Tus
labios y los míos
están
en deuda…
Necesitan
una pausa
no
maldita.
24.2.2016
Carmen
Hernández Rey
©®
autora extremeña
todos
los derechos de autora
Comentarios
Publicar un comentario