
ABRIL
-año dos mil diecisiete-
Abril rompió su regazo acuífero,
anego a la mar cuando bailaba
tango de tu regazo a mi regazo
entre
tu costado y mi costado.
Abril,
se dejo sentir bajo el estigma
de otros tiempos y nos pasó
de otros tiempos y nos pasó
y
nos cabe y no nos cabe
en mitad
de nuestro sistema
en
este solar exiguo
-no cabe- no
ellos entre tú piel y mi piel.
-no cabe- no
ellos entre tú piel y mi piel.
A
dos mil diecisiete años con luz
y sonidos propios de ti mi amor,
nos -traspasa-
nos esperan para transitarnos
y sonidos propios de ti mi amor,
nos -traspasa-
nos esperan para transitarnos
en
un abril sin demoras
ya,
que se antoja…
Abril
Se
nos antoja binario de nuestros
medios,
nos forma hasta hacerse uno,
a galope,
a galope,
del
sentido y sentimiento
a
corazón abierto, busca el ajuste
acoplarse
cual nave nodriza
a ti este abril.
a ti este abril.
Abril a un cuarto de estación en los fueros
espaciales,
siento a mis corpúsculos
y
noctámbulos adoquines
fragmentarse
en la inhóspita
mitad de mitad de un calendario sin abriles
mitad de mitad de un calendario sin abriles
de
sistemas híbrido,
de
sistema solares ávidos
de
ti
en
las micra de una huella binaria
a
mitad de dos-cuerpos,
sin
abril.
Hoy
ya se antoja abril sideral
en tus
formas,
en la hipotenusa de ti de tu triangulo
en la hipotenusa de ti de tu triangulo
femenil
en
la cenital hoguera ascuas nuestras
de
los deseos partiendo en las naves
de
un mar adentro.
Abril cabe en diez siglo
y a
poco, nos existe en el tiempo
y
nunca de fuera de tus huecos
abrileños
aclamado,
infiernos- cielos
universos de los míos, abril es
universos de los míos, abril es
telurio
para fusionarme y vivir-te.
1.4.2017
Carmen Hernández Rey
1.4.2017
Carmen Hernández Rey
©®autora
extremeña
todos
los derechos de autora
Comentarios
Publicar un comentario