NO ELEGÍ
Nacer.
Nacer.
Tampoco que fuese
un día de julio
de un milenio con lustros...
sin pulir y tan lunática.
No elegí mi nombre
tampoco mis apellidos,
el cielo que habría de mirar
en mis eternos días,
¡No, definitivamente!
Nada o casi nada de cuanto
conforma mi vida...
-lo elegí-
Elegí ser algo diferente,
pero algo tarde,
algo poco tradicional,
y común a mí tarde...
Tardé la vida misma en no ser
parte de ese juego macabro
de la supervivencia,
donde el destino te nace
casi predestinada
por cojones.
Y sí... fiel a mí tarde
los "cien poemas de amor"
que un poeta solfeará
es más en describir el amor
creo que llegaré nuevamente
tarde...
Soy un caso sin resolver
dentro de mi propia vida...
¡Ah! se me olvidaba decirte...
No elegí nacer
tampoco la bandera
llegar tarde a tu vida...
-pero sé-
Ahora sé, que a pesar
de ser tarde
te amaré,
hasta ese día que decida morir
de amor, y sí...
fiel a mí también
llegaré un poco tarde.
11.7.2014
Carmen Hernández Rey
©® autora extremeña
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Foto del muro de velos de faltas
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