HAY GATAS...

CUANDO LAS GATAS NO SE LLAMAN MILEVA... NI  SON ROJAS NI NEGRAS...

 ¡Hay gata! te contesto... pero lo hago un poco más a lo bruto, y como dicen en mi tierra extremeña, en mi comarca de Barros...

Parafraseas a este hombre, tan sabio y a la vez tan necio, a Albert Einstein, y para que veas como se escribe la historia,  te copio, y muestra un botón. No es otra cosa  que el tratado que hizo jurar y firmar a su prometida, la pobre ilusa enamorada de una in-persona, ella la futura promesa de la ciencia se quedo en la esposa quebrada a la pata de la cama de un científico de gloria androcéntrica y machista, porque ella, Mileva olvidó Ser, a su ser en esa persona  innata, que no es de nadie, sino de una misma... Dolo supo acomodar-se a un ser ingrato con ella, a su ciencia, a su género los puso a los pies del felpudo del macho, y el persona ingrata con el género que le dio la vida, solo hizo lo que tantos hicieron a lo largo de la historia. 

La Verdad es que, Mileva, no fue una gata ni:

NEGRA

ROJA

 No supo de tejados,  por lo que de ahí que no hablase desde otro punto de fricción, rotación, trasladación, ensimismación, que no fuese la del amo...

 Ahí, le hizo falta a una perjura, roja-negra y gata casi apanterada... Seguro que el perjuro hubiese sido seguro y dado, en la misma calavera o guijarro de aquel Caín mal postulado que  no supo de muslos sino de frías y tristes probetas envidiosas de las manos féminas.

 Casi seguro, que el de cinc no hubiese sido ni frío ni templado, menos caliente, o abortado de ese seguro in cielo enladrillado, donde la gata maúlla en la parabólica moñiga de  este cien-tífico-dentrifico, este no hubiesen llegado a una de las sietes científicas vidas... ni a científico idolatrado-ilustrado.

Porque seguro es que tampoco supo de un hombre que hablaba con  Zaratustra...

"Sufrimiento sería ahora para mí, y tormento para el curado, creer en tales fantasmas: sufrimiento sería ahora para mí, y humillación. Así hablo yo a los trasmundanos. Sufrimiento fue, e incapacidad, lo que creó a todos los trasmundanos; y aquella breve demencia de la felicidad que sólo experimenta el que más sufre de todos."

LAS CONDICIONES DEL CIENTIFICO A SU AMADA ANTES DE CONTRAER MATRIMONIO

Deberás asegurarte de:

.mantener mi ropa y la del hogar en buen estado

.servirme tres comidas en mi habitación.

.mantener mi dormitorio y el estudio limpios, y debe quedar claro que mi mesa de trabajo es para mí, y uso exclusivo...

(ella también era científica y mejor que él, de ella se valió para coger mucho de sus éxitos, pero donde está escrito... detrás de un hombre de éxito siempre hay una gran mujer...) sigo con sus DERECHOS..

.Renunciarás a cualquier tipo de relación personal conmigo en la medida en que no sean estrictamente necesarias por razones sociales. En concreto, renunciarás a:

.sentarte en casa junto a mí.

.pasear o viajar juntos.

Tendrás en cuenta los siguiente puntos:

.no mantendremos relaciones íntimas, ni me reprocharás nada.

.dejarás de hablarme si yo te lo pido.

.abandonarás mi dormitorio o estudio inmediatamente, y  sin protestar, si te lo pido.

.Te comprometerás a no menospreciarme delante de nuestros hijos, ya sea con palabras o hechos.

Mileva aceptó aquellas condiciones pero, como era de esperar, no duró mucho. En 1914, Maric abandonó Berlín con sus hijos y se trasladó a Zurich. El 14 de febrero de 1919 se divorciaron.

¡Qué difícil es vivir con un genio, tan idiotizado!

Zaratustra habla y dice denuevo "Que agradable es que existan palabras y sonidos: ¿palabras y sonidos no son acaso arcos iris y puentes ilusorios tendido entre lo eternamente separado?"

Me quedo con tus deseos mi querida Gata de ese café de hoy, con ese azucarillo de beso, en el arte de amar de una cama más renacentista y liberal que la misma Francia en su revolución y en sus años de mil novecientos sesenta y seis...el "Hippie y flower" solo vale por unas horas de amor en una cama donde no se necesita trincheras, pero sí mucha "guerra" y estas son  para mujeres muy renacentistas pero de cuerpos de  cortesanas, porque ¡Me sale del coco! Ser lo que a muchos les molesta...

Somos las protagonistas obligadamente participes de nuestra obras maestras, y el amor no es burgués sino arrabalero, y porque lo mandan nuestras señoras cachas de buenas y realísimas puñeteras y divertidas gatas,

Por eso y ahí que ni el número Pi obtenga beneficios algunos, y los pictogramas obtengan sellos de calidad ante menudas nalgas de mininas que ronronean cuando la luna se viste de plata anaranjada. Y ya en los horizontes mininas no quedan, catetos en ni camas de señoras damas, las nuestras camas, nuestras sábanas raspan las caspa rastrera de los sin oxígenos, aquellos incontaminado ¡Por dios qué guerra!

Guardan sus llaves de suma y relevancia importancia, pero Gasta... ¿Quien daría perlas a los cerdos, pondrían un manjar a una hiena que come carne putrefacta?
¡Paso!

¡Ay! Gata, el tiempo de morir por un turbio intento, pasó a otro ring, otro asalto... Y de Ser lo que no se es, en unos viejos mapas de vetusto preceptos ¡afortunadamente ya! el tiempo puso umbrales ¡Que sean nuestras las guerras!

Me quedo con la educación vía de piernas y pelvis en celos y el manejo de car hasta el túnel de todo los tiempo.

Solo me falte ese buen bouquet de vino añejo de mi tierra, tinto como la sangre que llevo dentro, igual de la misma cuna, igual de la misma bodega...

¡Gata va por ti... tuyo es el tema... renacentista y posmoderna nació la gata roja...revolucionaria la negra!

3.10.2013

Carmen Hernández Rey

© autora extremeña

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